Empar Pineda

Empar nació en Hernani. Comenzó a estudiar filología románica en Madrid. Por aquella época (año ‘64) aún no conocía el dicho feminista que dice “las mujeres buenas van al cielo y las malas a todas partes”, sin embargo parece que pertenecía al grupo de “las malas” porque fue expedientada y terminó sus estudios entre Salamanca y Huelva.Al poco de morir Franco fue a vivir a Barcelona e inició su militancia feminista. En mayo del año 76 se celebraron las primeras Jornades Catalanes de la Dona, que marcaron un antes y un después en la vida de Empar, transformando la perspectiva desde la que analizaba la situación de las mujeres. A partir de entonces, participó en la creación de la Coordinadora Feminista de Cataluña, y más adelante, en Madrid, creo la colección que aún hoy dirige “Hablan las mujeres” de la Editorial Talasa.Participó en la comisión pro-derecho al aborto y en la fundación del Colectivo de Feministas Lesbianas de Madrid, para visibilizar el lesbianismo y la sexualidad femenina. La revista “Nosotras, que nos queremos tanto” editaba desde este colectivo, ayudó a que el conjunto del movimiento feminista reivindicase una sexualidad para la mujer, no exclusivamente la heterosexual.A partir del año ‘93 trabajó en la clínica Isadora, atendiendo e informando a mujeres que decidían abortar. Mantuvo siempre la ilusión del primer día, porque vivió este empleo como una continuación de la actividad que desarrollaba pro-derecho al aborto.Cuando en 2009 se jubiló, atravesó un primer periodo de crisis con dificultades para asumir esta nueva condición. Hoy día, además de la dirección de “Hablan las mujeres” colabora con el colectivo de Defensa de los Derechos de las Trabajadoras del Sexo Hetaira, participando, entre otras actividades, en el reparto de preservativos en zonas de prostitución de Madrid. Es también vicepresidenta de la Fundación 26 de diciembre, que trabaja por los derechos de la gente ma yor LGTB.