“EN EL 22 CONGRESO DE LA IAGG QUEREMOS QUE LOS JÓVENES PARTICIPEN”

El presidente de la Asociación Internacional de Geriatría y Gerontología (IAGG) prepara el 22 Congreso, el próximo mes de junio, para valorar las consecuencias de la pandemia en el trato a los Mayores, la vuelta del edadismo y la definición de vejez como enfermedad por parte de la OMS. Fragilidad, sarcopenia y demencias estarán en el programa de este encuentro.

-¿Nos puede presentar este próximo Congreso de la IAGG?

El momento mundial es muy particular. Debería haberse celebrado en junio de 2021 y decidimos aplazarlo un año por motivo de la cuarentena y que no eran posibles los desplazamientos. Se celebra finalmente del 12 al 16 de junio en formato virtual cien por cien. La decisión final se tomó teniendo en cuenta que muchos países no tenían autorizados vuelos, las universidades no financiaban a sus profesores, la hostelería empezaba en Buenos Aires… Todavía había mucha incertidumbre de modo que decidimos optar por hacerlo virtual.

Tenemos el objetivo de realizar el cambio de autoridad de la IAGG y también que la mayor   cantidad posible de personas pueda participar; sobre todo que sea la ocasión de que jóvenes puedan presentar sus trabajos de investigación y se vayan sumando a la geriatría y a la gerontología. Por eso hemos optado por una inscripción de 200 dólares mientras que habitualmente estos congresos pueden estar en los 700 u 800 dólares. Queremos que los jóvenes empiecen a participar.

-¿Y en cuanto al programa y a ponentes, qué destacaría?

Uno de los temas, evidentemente, será la pandemia de coronavirus. Y habrá otros como la discusión con la OMS sobre la consideración de la vejez como enfermedad al tiempo que declaran el Decenio de Envejecimiento Saludable. Dos temas que suponen un contrasentido. Serán dos temas importantes además de todo lo médico y asistencial.

También tenemos un objetivo muy claro de dar espacio al habla hispana. La lengua oficial es el inglés en estos congresos, habitualmente, pero ya que lo hacemos en Argentina dedicaremos protagonismo al español. También a través de la Academia latinoamericana del adulto mayor donde participan muchos españoles.

Abre el congreso Jean Pierre Michel, responsable de la Academia mundial de gerontología y geriatría, una de las estructuras de la IAGG que funciona en varios continentes, con cursos en distintos continentes y mucha ligazón con Europa. Otra área importante es la red internacional de instituciones que hacen investigación en envejecimiento y que está presidida por un español, Leocadio Rodríguez Mañas, actual Director de la Global Agency Research Network, otra estructura que comanda la IAGG. Vamos a hacer énfasis en que parte de los “speakers” sean  latinoamericanos y españoles. Me gustaría hacer un llamamiento para la participación a pesar de pandemias y problemas.

-¿Va a estar muy presente el Covid?

El tema más importante es la fragilidad y la sarcopenia, sobre todo relacionados con Covid; también las vacunas tendrán un lugar importante; y nunca está fuera de las reuniones todo lo referente al deterioro cognitivo y demencia, sobre todo en cuanto a los últimos avances. También va a haber un simposio con una ong que trabaja mucho en fracturas y rehabilitación en personas mayores en el mundo FFN (Frailty Fracture Network).

-¿Las prioridades para los profesionales son las mismas en todo el mundo?

Hay algunos temas de interés global que vamos a tener en cuenta como el referente a retiro, jubilaciones, pensiones… En Latinoamérica estamos muy retrasados en este aspecto. Otro es el de los derechos de los adultos mayores. Hay una convención latinoamericana que se está afirmando en este campo, aunque no está firmada por países como EEUU y Canadá.

Todo apunta a que la prevención del envejecimiento saludable es un campo que necesita mucha investigación. Todos deberíamos acceder a ello. De ahí se desprende la prevención de la sarcopenia, la fragilidad… que quiebra a las personas desde un punto de vista funcional pero también deberíamos trabajar cuáles son las mejores estrategias.

En los próximos años será importante el desarrollo de gasto para afrontar el alzheimer y otras demencias. No hay nada en el mercado o en el desarrollo de sistemas de salud tras la pandemia. Hay que ensayar proyectos y programas que incluyan al tercer sector y es crítico y fundamental trazar estrategias gubernamentales. Me dediqué hace un tiempo a trabajar en situaciones de crisis y la pandemia mostró que el mundo no estaba preparado para tratar también decisiones éticas. Tengo la sensación personal de que como la pandemia empezó a aflojar la visión edadista vuelve a estar presente, la no visibilización de la persona mayor.

Creo que se vuelve al foco de antes de la pandemia y también hay que considerar que en los medios se ha asustado a la población. Hay que plantearse cómo manejar la comunicación social y comunitaria y la de los medios que a veces se mueven en el desconocimiento. También influye cómo los gobiernos quieren manejarla. Ahora la opinión pública sabe mucho más y hay asesores gerontólogos en los medios.

-Desde este congreso tendrá cuatro años por delante al frente de la IAGG…

Sí, mi candidatura fue aprobada en el 2017 y se me ratifica en este congreso de 2022 como presidente electo. Permaneceré hasta 2026 cuando tomará el relevo Holanda y tomará la presidencia de la IAGG , una profesora de enfermería por primera vez.